Capítulo 374 No me culpes por ser despiadado

Dylan estaba completamente sin palabras.

Carlos estaba justo en su cara, haciendo difícil incluso respirar.

Carlos no solo era alto; estaba construido como un tanque, haciendo que Dylan se sintiera como un insecto.

Dylan miró hacia abajo y murmuró: —Solo hablo por mí mismo aquí.

Carlos se burló:...

Inicia sesión y continúa leyendo