CAPÍTULO 98

La gente empezó a alejarse, pero una multitud estaba creciendo. Segundo.

—Él NO es tu novio.

—¿Cómo te atreves? Él es mi novio, no tienes derecho a estar aquí con él, ¡vete!

Stella seguía tranquila, pero lo que dijo a continuación hizo que mi lobo danzara.

—Kate, no tienes derecho a estar aquí, y ag...

Inicia sesión y continúa leyendo