Verde

Eleni

El deseo ardiente se enrosca entre mis piernas mientras Dante me mira, sus ojos ardiendo y la prueba de mi desobediencia detrás de mí. Parte de mí quiere correr a su cama, hacer lo que él pida. El resto de mí quiere saber hasta dónde puedo empujarlo.

Cruzo mis brazos bajo mis pechos, empujánd...

Inicia sesión y continúa leyendo