Capítulo 29

No estaba segura de cuánto tiempo estuvimos allí mirándonos a las almas, pero lo único que rompió la conexión fue el sonido de un grito que venía de la cubierta superior.

—¿QUÉ DEMONIOS...? —grité y salí corriendo. Corrí a través del yate, saltando escalones para llegar a Catherine, ya que fue su g...

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