Capítulo 263

—Está bien —digo, acariciando suavemente las orejas del perrito, notando cómo su respiración se profundiza mientras empieza a quedarse dormido, probablemente una reacción muy de cachorro al estrés—. Tienes mi atención, Iván. A la fuerza. Pero está bien, cuéntame sobre esta oferta.

—No puedo —dice, ...

Inicia sesión y continúa leyendo