Capítulo 31

Cuando finalmente llegamos al sedán negro, Kent y Daniel se suben al asiento trasero a ambos lados de mí, dejándome atrapada en el medio. Apretada entre ellos, coloco mis manos entre mis rodillas e intento respirar de manera uniforme.

—Vamos —dice Kent firmemente a Carlos, quien obedece y arranca e...

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