Las orejas detrás de las paredes

Las puertas del palacio se abrieron. Los sabios entraron dramáticamente, cada uno vestido con una larga y siniestra túnica oscura.

Uno por uno, se acercaron al trono e hicieron una reverencia ante él.

Daemon disfrutaba de su vista. Ellos eran los que había estado esperando. Los sabios oscuros que ...

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