Handfast

Parpadeó de nuevo hacia la irrealidad bajo el árbol del mundo.

A su alrededor, las piedras sagradas se erguían orgullosas y altas, extendiéndose hacia la noche, actuando como vigilantes y guardianes, bendiciendo su sacramento. Detrás de ellos, el Árbol del Mundo se alzaba como un testimonio de su p...

Inicia sesión y continúa leyendo