Capítulo 237

La sala de espera del hospital olía a antiséptico y tristeza.

Jaden estaba sentado encorvado, con la frente contra sus rodillas, los dedos entrelazados en su cabello. Su respiración era superficial, entrecortada. Las luces fluorescentes zumbaban arriba como moscas que rodean el temor.

Entonces—

T...

Inicia sesión y continúa leyendo