Capítulo 263

El pasillo afuera estaba tan silencioso como una tumba. Dimitri se detuvo, con los dedos descansando en el pestillo.

Exhaló una vez. Lentamente. La carpeta se sentía pesada bajo su brazo—todavía podía oler a lobo en ella. En Ivan.

La firma de Kaelan estaba por todas partes en los documentos de más m...

Inicia sesión y continúa leyendo