Capítulo 395

La luz de la luna se derramaba sobre el balcón de mármol, plateando las cortinas. La habitación estaba en silencio, salvo por el leve crepitar del hogar y el sonido rítmico de las páginas al pasar.

Alaric ya se había bañado — el aroma del jabón de cedro y algo ligeramente metálico aún se aferraban a...

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