Capítulo 81

Las pisadas de Serafina resonaban por los corredores tenuemente iluminados del palacio. La luz titilante de las velas proyectaba largas sombras sobre los suelos de mármol, pero su expresión permanecía indescifrable, regia—hasta que llegó al estudio de Dimitri.

No tocó la puerta.

Empujando la puert...

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