Capítulo sesenta y nueve

Capítulo Sesenta y Nueve

—Anna, eres una traviesa—Cameron me sonrió con picardía.

Las clases habían comenzado de nuevo, intensificándose un poco ya que solo quedaban unas semanas hasta el próximo descanso. Cameron, Dillon y yo estábamos sentados en la biblioteca tratando de estudiar. Era dif...

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