Corre.

El tono de voz lleno de ira hizo que Seth saltara de sorpresa. Nunca se imaginó ni sospechó que él la estuviera siguiendo. Se dio la vuelta y se encontró cara a cara con un Dominic furioso.

—¿Dominic? ¿Qué haces aquí? —Seth frunció el ceño, mirándolo con desconfianza.

Por supuesto, no esperaba ver...

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