Capítulo 434: La gente buena no vive mucho

Los ojos de Jonathan parpadearon. ¿Cuántos años habían pasado? Casi había olvidado que Melinda solía seguirlo, llamándolo "hermano".

Pensó que nunca volvería a escucharlo, pero ella aún lo llamaba.

—Mel, te prometo que no te fallaré de nuevo.

Melinda asintió. —Espero que lo digas en serio.

No te...

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