Capítulo 51 SENTENCIAS

Mientras que Gerardo se quedaba con el trago amargo, al contemplar la posibilidad de que podía ser encerrado.

La realidad para Rodrigo, no era tan distinta; sentado en el suelo, con la espalda apoyada en la pared. llevaba días sin probar bocado sólido; solo bebía agua del grifo oxidado y las ojeras ...

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