Capítulo 486 Honestidad

Cecilia estaba a punto de descargar su frustración en el árbol e irse, pero el repentino haz de una linterna la hizo girar y saltar instintivamente a mis brazos.

—Si nos atrapan, estaremos en un gran problema.

Una de sus manos descansaba en mi hombro izquierdo, mientras que la otra agarraba mi bra...

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