Capítulo 34

—¿Y tú le crees?— Celine exclamó incrédula. Irónicamente, su reacción reflejaba la expresión de mi esposo cuando le conté sobre el embarazo de Natalia.

—Tengo razones para hacerlo— murmuré. Era obvio que Celine no confiaba en Natalia ni un poco. —Después de todo, Natalia me confesó, y no puedo pens...

Inicia sesión y continúa leyendo