Capítulo catorce

CASSIE Y YO

Cassie y yo nos sentamos en silencio en el alféizar de su ventana. Teníamos tantas palabras no dichas y el consuelo que nos brindaba la luna creciente sobre nuestras cabezas era todo lo que necesitábamos. ¿Por qué era tan difícil crecer? ¿Por qué teníamos que pasar por tanto solo porque...

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