Capítulo 295: La agonía de la soledad

—Eres la mujer de Pierre. ¿Viniste aquí para empeorar las cosas entre nosotros? —susurró Gabriel.

—Así que le tienes miedo —Alison se armó de valor. Aunque el frío contra su cuello la inquietaba, su miedo se desvanecía gradualmente.

—¿Quién dice eso? —gruñó él—. No te creas tanto. No pienses que n...

Inicia sesión y continúa leyendo