Capítulo 146

—¿Qué?! —exclamé sorprendida mientras miraba a mi mamá con los ojos muy abiertos—. Mamá, tienes que estar bromeando —dije entre dientes apretados.

—Lo siento mucho, hija, esto es todo culpa nuestra —respondió con los ojos vidriosos.

Bajé la mirada hacia las sábanas—. ¿Por qué tengo que ser yo la q...

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