CAPÍTULO 13

Ella se quitó el auricular, sonriendo ampliamente.

—¿Quién soy yo para rechazar vino? ¿Pero estás seguro?

—Sí. Además, todavía tengo que compensarte por asustarte a ti y a Becky. Te ayudaré a bajar. No quisiera que te cayeras.

—Oh no, no querríamos eso —murmuró.

Llevaba pantalones largos esta noche...

Inicia sesión y continúa leyendo