Capítulo 37

El trato en esta casa de huéspedes era muy bueno, y había algunas comidas disponibles en el primer piso. Sin embargo, debido a la habitual reticencia de Martina a salir y conocer gente, nunca bajaba a comer.

Así que, aunque escuchó la invitación, educadamente declinó su amabilidad.

—No, gracias. A...

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