Capítulo 224 Puedo golpear a mi esposa cuando quiera

Emily tomó una respiración profunda.

—Dr. García, lo entiendo.

Lo había entendido antes, pero ahora lo comprendía aún más profundamente.

El día pasó rápidamente.

El trabajo de la tarde no fue particularmente ocupado, pero debido a lo que sucedió en la mañana, Emily estuvo de mal humor toda la ta...

Inicia sesión y continúa leyendo