Capítulo 559 No se casará contigo

Amelia empujó la puerta de la oficina con una sonrisa en el rostro, llamando suavemente: —Micah...

Sin embargo, cuando vio a Micah con tres niños trepando sobre él, no pudo evitar quedarse atónita. —¿Qué... qué está pasando?

—Papá, ¿quién es esta señora tan bonita? —Los ojos de Nathan se iluminaro...

Inicia sesión y continúa leyendo