El segundo calor II

El aire fresco de la noche golpea mi rostro y me toma un momento darme cuenta de que estoy planeando sobre la ladera, la luz de la luna brillando contra los charcos de agua de lluvia abajo.

—¿Peri? ¿Eres tú? ¿Estás bien?— Mi corazón late con esperanza antes de que una voz familiar responda a mi lla...

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