Capítulo 40

Kelvin se marchó sin mirar atrás, dejando un silencio tenso a su paso.

Lucy rompió el silencio de manera incómoda —¿Es algo que dije ayer lo que hizo que me odiara?

Alberta puso los ojos en blanco y se tocó la sien —No, solo le faltan unos cuantos tornillos.

Kelvin no se había alejado mucho y esc...

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