Omertà

Althaia

Mi corazón latía más rápido y mis nervios estaban por todas partes. Pero una suave sonrisa de Damiano me calmó y me hizo tomar una respiración profunda.

—Ven —me habló suavemente y me llevó a un escenario que había sido preparado. Nos detuvimos frente a un podio, donde había una copa, ...

Inicia sesión y continúa leyendo