Capítulo 106

La luz del sol se filtraba a través de las ventanas del dormitorio, pintando patrones dorados sobre las sábanas arrugadas. Me quedé allí, sintiendo que mi cuerpo había sido atropellado por un camión—dos veces. Cada maldito músculo dolía, evidencia de la noche que habíamos pasado juntos.

A mi lado, ...

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