Capítulo 232

Elsa

—Puedes quedarte en el suelo— dije fríamente, subiéndome a la cama y envolviéndome con las sábanas tan fuerte que apenas podía respirar. —Tu preciosa Vera no está aquí para cuidarte, así que tendrás que sufrir como el resto de nosotros.

Le di la espalda, enterrando mi cara en la almohada y ce...

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