Los tontos se apresuran

Mikey siempre tiene hambre. Su estómago es un pozo sin fondo que nunca parece llenarse, sin importar cuánto coma. Cualquier comida que esté a su alcance, corre hacia ella con una determinación implacable, y cuando no se le permite comer cuando tiene hambre, estalla en berrinches ruidosos que no para...

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