Nueve Las secuelas

Nadie—NADIE—podía rechazar a Lucille Saint-Claire y salir ileso. Esta sería la colina en la que moriría. Este sería el lema en su lápida si alguna vez muriera.

Aun así, nadie podía borrar el hecho de que había sido rechazada anoche por un don nadie.

Eso tenía que ser lo más vergonzoso que había ex...

Inicia sesión y continúa leyendo