Capítulo 124

Prefería enfocarme en el pasillo y no ver a Nora siendo manoseada por tres guardias, aunque evidentemente a ella no le importaba.

—¿Uh?

No respondió, ¿por qué diablos no respondía?

Maldita sea, eso significaba que tenía que darme la vuelta y ver el espectáculo de lo que estaba a punto de suceder....

Inicia sesión y continúa leyendo