Capítulo 146

Respirar el aire fresco de otoño y observar cómo todo moría lentamente a mi alrededor era lo único que me calmaba y me permitía pensar por un momento.

La brisa fría recorría mis brazos y enfriaba mi piel. Era un cambio bienvenido del calor constante que consumía mis sentidos, ya fuera el ardiente d...

Inicia sesión y continúa leyendo