Capítulo 26

Desperté en la enfermería incapaz de moverme al principio. El dolor que iba desde mi cabeza hasta mis rodillas me mantenía inmóvil y las sábanas estaban manchadas con la sangre de mis heridas.

Lo primero que vi fue a la señorita Elise, sentada en una silla leyendo un libro, y parecía tranquila si n...

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