Desprecio - Parte II

Ahí estaba ella, vestida con todo su equipo empapado en sangre fresca, escondida en un roble cerca del santuario. Esas criaturas, como decía la carta, acechaban en las sombras, esperando atacar. Habrían atacado si ella hubiera llegado un momento más tarde.

Miraba la entrada, o más específicamente, ...

Inicia sesión y continúa leyendo