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POV de Lia

Me senté en la acogedora sala de estar de Benedicta, el calor de su hogar calmando la inquietud que hervía en mi pecho. Traté de concentrarme en la conversación, pero mi mente seguía volviendo a los eventos de los últimos días. No podía sacudirme la sensación de que alguien me estaba obs...

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