Capítulo 41

Observé cómo se quitaba la ropa, dejándolo completamente desnudo. Su erección me miraba fijamente. Tragué saliva, estaba tan duro. Justo cuando imaginaba cómo iba a caber dentro de mí.

Carraspeó, sacándome de mis pensamientos. —Baja— me instruyó con una voz profunda y ronca.

Bajé de mi cama y me p...

Inicia sesión y continúa leyendo