Capítulo 48 No muerdas

Manuel estaba realmente entregado, y cuando Catherine lo tomó por completo, apenas podía recuperar el aliento. Cada embestida profunda hacía que la respiración de Manuel se volviera aún más pesada.

Catherine podía sentir su impresionante tamaño golpeando constantemente el fondo de su garganta. Era ...

Inicia sesión y continúa leyendo