Capítulo 116

Marianne finalmente abrió los ojos y lo miró. —Este es el primer regalo que me dio tu padre. Por muy nuevo que sea, no lo reemplazará.

Seth asintió y le sirvió un vaso de agua.

Marianne lo miró y preguntó —¿No te gusta esa chica, Cecilia, verdad?

Seth miró a Marianne. —No, no me gusta.

Marianne ...

Inicia sesión y continúa leyendo