Capítulo 135

La mano de Layla se congeló un segundo cuando escuchó las palabras halagadoras del camarero. Instintivamente levantó la vista.

Sus ojos se encontraron con los de Seth.

Se miraron por un momento antes de que Layla apartara la mirada.

Noah también había notado la conmoción. Sin volverse, supo quién...

Inicia sesión y continúa leyendo