Capítulo 336 Cecilia, no te estás perdiendo nada

Dentro del coche, los labios de Cecilia estaban hinchados.

Miró a Alaric con una expresión satisfecha.

Él, sin vergüenza, dijo: —No perdiste nada.

Ella sentía que había perdido mucho.

Y él decía que no había perdido nada.

Sin mencionar la vida pasada, en esta vida, ella era tan pura como una ho...

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