Capítulo 20

Al día siguiente, camino al trabajo, estaba caminando por el lado de la carretera. Según el sentido común, Brian ya debería haberse ido a esta hora. Sin embargo, un Bentley negro se detuvo justo frente a mí.

—Sube.

Bajó la ventanilla del coche. Me quedé allí, fingiendo no escuchar. Él miró su relo...

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