Capítulo 274

En el hospital.

El olor penetrante del desinfectante se percibía en el aire.

Adelaide abrió los ojos a una habitación tenuemente iluminada.

—Por fin estás despierta, me tenías preocupado— dijo Sebastian con la voz ronca de preocupación.

La acercó a él, su voz temblaba.

Mientras Adelaide descans...

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