Vuelve a ser mía. Capítulo 28

Helen palideció por completo, y Kate abrió sus labios en una gran O.

—¡Déjate de bromas Fernando! —reprochó con molestia. —¿Cómo se te ocurre decir eso en delante de Helen?, ¡Eres un inconsciente hijo!

Él negó con la cabeza y soltó una risa burlesca.

—Mira Helen, es mejor que te acostumbres a e...

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