Capítulo 53: Verdades que Rompen

Diana abrió sus ojos con lentitud, tan solo una lámpara con la luz tenue alumbraba la alcoba, entonces fijó su mirada en su esposo quién leía un libro sentado en la mecedora.

—Rodrigo ¿Qué haces aquí? No era necesario que te quedaras a mi lado —recriminó, llevándose ambas manos a su rostro llorando...

Inicia sesión y continúa leyendo