Deja que tu marido impregante Judy

—¡Judy perdió a su bebé! —Cuando mi tío dijo esto, sentí como si acabara de escuchar el chiste más salvaje de mi vida. ¿Me llamaron solo por eso?

—¿Perdió a su bebé? ¿A mí o a quién? —No puedo evitar preguntar.

Entonces ella se levantó de la silla y tiró más de mi vestido—. ¡Tú eres la causa, Alice!...

Inicia sesión y continúa leyendo