Capítulo 3 El pasado

Los sirvientes no guardaban rencor y se reunieron alrededor de Emily, colmándola de cumplidos. Solo unas pocas palabras amables eran suficientes para hacer feliz a Emily. De buen humor, no le importaba Sophia, quien no representaba una amenaza para ella, y siguió a los sirvientes hacia la villa.

El viento frío, afilado como una cuchilla, azotaba la noche, haciendo crujir las hojas y aullando. Sophia, con su ropa delgada, sentía sus manos y pies entumecidos por el frío.

Pero su corazón estaba aún más frío.

En ese momento, Sophia sintió verdaderamente el dolor de ser abandonada. Había sido la dueña de esa villa durante cuatro años, y ahora, justo después del divorcio, había sido reemplazada.

—¡Adiós, villa Jones!— Tomando una profunda respiración, Sophia se alejó sin mirar atrás.

Esa noche, alquiló un apartamento de una habitación en el centro de la ciudad. Era pequeño, pero suficiente para ella. Después de vivir en una villa vacía durante cuatro años, no quería estar en un lugar tan solitario nunca más.

Sophia sintió un alivio inmediato. Estaba libre de la espera inútil y del peso de ser "la Sra. Sophia Jones".

La libertad se sentía tan dulce.

Sintiendo una nueva liberación, Sophia sacó su teléfono y desbloqueó un contacto ruidoso, luego marcó el número.

Tan pronto como la llamada se conectó, Sophia sintió un pinchazo de arrepentimiento, dándose cuenta del incesante parloteo que se avecinaba.

—¡Sophia, han pasado cuatro años y finalmente te acuerdas de mí!

—¡Escuché que te estás divorciando, felicidades! ¡Deberías haber dejado a ese idiota de David hace años!

—Mientras estabas atrapada con la familia Jones, tu leyenda estaba por todo el Submundo. ¡Si esas personas supieran que tú eras la gran figura que han estado buscando todos estos años, se quedarían boquiabiertos!

—¿Estás planeando algo grande esta vez? Yo...

—¡Cállate!— La cabeza de Sophia palpitaba por el ruido.

Joseph Miller se suponía que era un noble rebelde en Harmony City, pero frente a Sophia, solo era un subordinado ruidoso. No había podido contactar a Sophia durante cuatro años, y ahora que ella llamó, estaba más que emocionado.

Pero su emoción no afectó a Sophia. Ella lo interrumpió —Le prometí al abuelo que no volvería al círculo. Si me respetas, mantén esto en secreto.

Sophia tenía un pasado emocionante, pero no quería volver a él ahora.

Fue directa al grano —La razón por la que llamo es para pedirte que investigues algo para mí...

Después de organizar sus planes, Sophia recibió un mensaje de David.

Su corazón dio un vuelco.

[Mañana a las 9 AM, en la oficina de divorcios.]

El mensaje era tan brusco, como una orden de un jefe, y Sophia instantáneamente se sintió indiferente. Sí, no debería haberse enamorado de él.

[Entendido.] Sophia respondió con la misma frialdad.

Al día siguiente.

La luz de la mañana se filtraba a través de las puertas de vidrio de la oficina de divorcios, iluminando el suelo. Sophia estaba de pie en la entrada temprano, vestida con un sencillo pero elegante vestido rojo, con un maquillaje impecable, lista para su nueva vida.

Pero se sentía un poco mareada, probablemente por haberse resfriado la noche anterior y tener una ligera fiebre.

Aun así, no afectaba los asuntos importantes.

Un Rolls-Royce negro se detuvo frente a Sophia, y David salió lentamente. Alto e imponente, con una expresión severa, su traje negro lo hacía parecer aún más inaccesible.

Al ver a Sophia, David sintió una mezcla de asombro y confusión. Pero no lo mostró, solo frunció ligeramente el ceño y caminó fríamente hacia el salón.

—¿Tan ansiosa?— La voz de David era baja, con un toque de insatisfacción.

Sophia se dio la vuelta, un poco sorprendida.

¿David la estaba burlando? ¿Este CEO podía burlarse de la gente? Nunca lo había sabido antes.

Pero al ver los pasos rápidos de David, ¡él parecía el más ansioso!

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