Capítulo 87 La sala de juegos

Los labios de David se torcieron en una sonrisa burlona, como si encontrara sus respuestas hilarantes.

—Bueno, nosotros... —Sofía se quedó callada.

—No hay necesidad de explicar —interrumpió David—. Sofía, si no estás contenta con el acuerdo de divorcio, solo háblame.

Sus labios se apretaron con ...

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