Cap. 77: ¡Solo mía!

Fabio la envolvió con ternura, con fuerza, como si pudiera protegerla de todo lo que dolía.

—Yo no quise dudar de tu amor —murmuró ella entre sollozos—. Pero siento que no soy suficiente… que no merezco esto, que tarde o temprano te vas a arrepentir…

Fabio la alzó el rostro con las manos, mirándol...

Inicia sesión y continúa leyendo